9/7/08

El Origen de Manfred

Resulta que el señor zero, el Han Solo de esta nave, me solicita -con esa insistencia característica de los maestros- que me estrene en el blog; y lo hace señalando amenazante el botón de “EJECT” como única alternativa; y aquí tenemos al viejo Manfred -cumplidos los 33 y en los tiempos que corren puedo emplear esta expresión- que nunca ha hecho caso ni a su padre, que amedrentado –Manfred, no su padre- comienza su andadura por el mundo literario cibernético. Y digo literario porque eso es lo que pienso hacer en este blog: escribir. Y es que aprovecharé que el cupo audio-visual está cubierto para hacerme un ciberhueco y tratar de cultivar este arte que en su día dejé apartado y, por supuesto, para daros tanto la brasa que il profesore macio alfa se lo piense dos veces la próxima vez que quiera darme con la regla con tal de no tener que leerse una de mis digestiones.
Hoy tengo varios temas que agitan mis neuronas, pero creo que comenzaré por el principio y cumpliré con lo dicho, hablando del súper macho alfa don Manfred Von Richthofen, del cual he tomado prestado su nombre para mi nick y al cual siempre he tenido gran admiración. Y por qué Manfred, pues es evidente: porque nació un 2 de mayo como mi sobrino-clon Jaime y fue herido en la cabeza un 6 de julio, día de mi cumpleaños, para morir un 21 de abril (hum… esa fecha no me dice absolutamente nada), pero lo que si me dice es que fue ¡enterrado con honores por sus propios adversarios!, ¡qué final!, ¡qué grande! A casi todos os parecerá estúpido, pero a mi me parece grandioso. Un tío que va tan sobrao que pinta su avión del color más vistoso, para que cuando le vean sus adversarios se caguen por la pata abajo. Y es que yo creo que el Barón, eligió morir así, como Aquiles en la guerra de Troya (por lo menos lo que sale en la peli). Es decir, eso le dio sentido a su existencia. Y a mi me parece un gran sentido. Por qué no. Yo creo que hay dos cosas que dan sentido a la vida de uno, que son por orden de importancia: tener un/unos hijo/a/os/as, o hacer algo por lo que seas recordado en mayor o menor medida. Este tío cabrón era un pedazo de guerrero y un caballero y sabía que había pocas posibilidades de cumplir la primera premisa (la de los hijos), así que fue a saco a por la segunda y, para mi, que esas cosas me gustan tanto, dio de lleno en el clavo, entró en la leyenda y ahora bebe cerveza con Aquiles. Va por ti Manfred, gracias por el Nick…
"Success flourishes only in perseverance--ceaseless, restless perseverance."
Manfred von Richthofen
P.D. Para saber más sobre la lucha aérea en la WWI, puedes visitar esta maravillosa página: www.theaerodrome.com

5 comentarios:

zero dijo...

Joder Manfred!
Buen post si señor!
Esto me pasa por invitar a bordo a un informático!!!

Mr Kiwi dijo...

"...y ahora bebe cerveza con Aquiles" donde? en Valhalla?

Mr Kiwi dijo...

Por cierto, he aqui el epitafio que le dedicaron los ingleses al barón:
"Aquí yace un valiente, un temible adversario y un hombre de honor. Descanse en paz"

manfred dijo...

Supongo que pasarán del Valhalla al Olimpo, y pim pam, lo que viene siendo la ruta de las deidades. Aunque me han comentado que la cosa esta ahora chunga, que hay controles según pasas el Aqueronte.

TioChan dijo...

De todas formas, si vuelas bajo, no te pillan en el control